Hoy es muerte.

De Tao Garcia.

Hoy, el cielo huele a misterio húmedo,
y se ven los colores de la soledad.
Eran días como éste recuerdo,
que los demonios salían a jugar.
Malditos infantes del averno, pensé.
Con ojos de lobotomía y el amor por lo fatal.
Eran camaradas de copas, aventura y píldoras de homicidio.
Con una inclinación a lo profano,
me incitaron a entender el apetito sexual.

¿Me pregunto, Qué paso con esa niña del 4B?
(No fue un primer amor, sino una borrachera inusual)
“Pues se asesinó hace 3 años mi gran amigo,
soltó el freno por amor a lo imposible,
y el automóvil la cortó, la picó y la violó.
Los vecinos comentaron durante meses como esa noche
había pintado su vida de dolor”.
El demonio, borracho y doblado me contestó.

A los pocos días una noticia en los periódicos vi de reojo
como Don Julián de la Concepción Palacios,
se había quitado la vida por la desidia,
que el suicidio de la del 4B le provocó
tomo el cuchillo que compró en Albacete (hogar del mejor acero del mundo)
Lo empuñó en ambas manos y el pecho enterito se cortó
Ausente quedo el viejo verde ese
y solo sabiendo él, que era un degenerado
el hijo de puta se nos murió
todo por que ya no podría ver a esa niña bella
ponerse minifaldas multicolor.

Y así paso mis días con demonios
leyendo de historias que se conectan a alguien a quien quise adorar
Egoístas abundan en estas tardes donde el cielo huele a misterio húmedo
y donde se ven los colores de la soledad.
Estas son las historias de los demonios
que yo llamo, esta actual sociedad.
Que daría yo para poder cambiar.